SOÑAR
Ahora es el sueño lo que
importa, la razón de vivir, el falso mimetismo de las dudas; esa divinidad de
los silencios arrollándolo todo, como si no quedase nada más por decir. Sólo
tiempo y auroras por nacerse; sólo sueños y espejos donde buscar la nube que da
sombra y, el regalo de un día, satisfecho de haber nacido.
La sensación de estar bajo una lona que resguarda del miedo
y de la lluvia que aún queda por venir. Esa pequeña estrofa que dejamos sin
leer la noche de las dudas. El viaje que siempre estuvo en ti, sin llegar a
saber de los destinos. Esa voz o misterio que escuchamos, cuando la voz nos
falta.
Y nada más profundo que la espera de aquello que sabemos
llegará; nada más profundo que, sabernos destinados a dejar de pensar en lo que
viene. Siempre alerta. Siempre dentro del mundo que nos dieron, para escribir
la vida. Poco importa la hora de los sueños, si no somos capaces de ver la
realidad a nuestro lado.
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