REZAGADO
Me quedo rezagado en el
camino, para ver si los que llegan, traen la alforja repleta de ilusiones y
proyectos. No me fío de avanzar solo y, sin embargo, me preocupa la dejadez de
aquellos que caminan sin un objetivo claro. No comprendo la voluntad de andar
sin un proyecto en la cabeza; esa sensación de andar por un camino equivocado.
Necesito saber que los silencios esconden sus palabras más
adentro de donde nace el miedo, más cerca y más profundo a la vez del escozor
primero de la suerte, de aquella interminable melodía que las tardes cantaban,
cuando nada ni nadie soñaba ingenuidades locas. Necesito comprender la razón
por la que fuimos destinados a probar de salto en salto, la longitud extrema
del alma de las gentes.
Las horas van pasando y nadie reconoce haberme visto. Soy la
voz sin voz de los sin miedo. El loco corazón descolocado que, a veces, acierta
de improviso y dice las verdades que me asustan. De todo lo que he sido, me
queda la certeza, de haber correspondido con la duda a esa pequeña farsa que se
inventan, aquellos que caminan por la vida, consumiendo su miedo y sus
torpezas.
Me
quedo rezagado en el camino…, tal vez la certidumbre corresponda, con la
quietud de un tiempo indefinido.
Comentarios
Publicar un comentario