EL
MUNDO GIRA Y GIRA
Somos el capricho de un
desorden que se inventa las normas que el hombre necesita para sobrevivir.
Nadie nos autoriza a desnudar los «Limbos», donde todos esconden su miedo y sus
linternas, para cuando la luz se apague sola y tengan que cruzar la «noche
oscura» del fin de la paciencia.
El miedo es un desorden que se nace en los labios y se apaga
en los hechos. Cuando el mundo se llene de gente fracasada, se abrirán las
compuertas donde se guarda el odio y, el mundo nuevamente, volverá a comenzar.
No se crean los «fuertes» que tienen todo atado; ellos van
recortando el salario del pobre, hasta que ya no puedan comprar lo que «ellos»
venden; así, la vida empieza a destrozar los limbos, mientras el mundo gira y
gira, eternamente loco.
Vengo de ese lugar donde la luz se apaga- Por casualidad, me he encontrado con la tumba de la familia Ramiro-Verdejo. Hace un hermoso día, zurean las palomas, los cipreses bordean los paseos y la gente retoca las lápidas. Los limbos comienzan en esa soledad en la que ya ho hay fuertes ni débiles. Y allí todos somos parte de ese desorden "que se nace en los labios y se apaga en los hechos". Saludos, Antonio.
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