SILENCIO
O VOZ
No hace falta la voz para
escribir silencios en el aire; la voz está presente detrás de los silencios,
por eso cuando calla, el silencio se viste de nostalgia y nos oprime lentamente
el corazón, hasta hacernos saber que, nada somos, a pesar de creernos dentro de
la batalla
Dejaré que los sonidos me embriaguen hasta caer derrotado
por el silencio mismo, a partir de ahí, volveré a la vida en su fragilidad y
sus dudas, me esforzaré en saber lo que calla la gente, en conocer lo que de
incierto encierra la levedad del «hombre»; esa postura ambigua donde nada se
entiende.
No hace falta la voz, y sin embargo, suena dentro de la
cabeza la voz que nos dejaron escuchar, sobre el silencio mismo.
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