CANSADO ESTOY...

 

Cansado estoy de adecentar la desnudez del alma. Ebrio de sabores y lugares, me preocupa llenarme de tristezas sin haber conseguido agregar la belleza del mundo a mis dolores falsos. Soy como la luz que se entretiene en derrumbar las sombras, mientras el vicio anega la cultura del fango. Me esfuerzo en creer que soy preciso, sin encontrar la fórmula correcta de un mundo corregible; mientras la gente llena los lugares y reserva la astucia de conseguir lo último, sin haber conseguido comprender la dureza del silencio más alto.

Cansado estoy… y no comprendo, por qué la certidumbre se esconde en los adentros de memorias sin fondo, cuando todos intentan comprometer la vida, antes de ser capaces de comprender lo incierto, Todo se me acumula, mientras el tiempo eriza la precisión del verso.